La fuerza de nuestro cuerpo no se sabe aun, lo que si sabemos que si nosotros nos proponemos a hacer algo, posiblemente lo logremos, esto le sucedió al húngaro Zsolt Sinka, quien realizó una gran hazaña, al no tener miedo de mover un avión.
Popeye, este es su apodo, por su tremenda fuerza y coraje, esto le ha ayudado a que su hazaña de mover un avión sea una realidad.
Pero este récord no ha sido el único, antes su pasatiempo era los vehículos, el cual movía con sus dientes, también camiones y hasta un tren.
sin duda Zsolt es un verdadero hombre con mucha fuerza, ha realizado muchos sorprendentes movimientos de objetos y transportes más pesados y siempre los alcanza a mover, seguramente intentará batir su propio récord mundial.